Miré por la ventana del bus...
...y encontré el otoño, derramado en la vereda.
Pardos-dorados sobre el césped y las aceras de Crespo.
Sospecho una leve brisa
en las hojas agitadas
y en el cabello despeinado de esa niña.
El cielo entre blanco y gris.
Sin sombras, el tiempo no pasa.
Nos ilusiona una tarde perpetua.
28/5/06
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