17/10/07

AGUA VIVA

Tráeme un poco de agua,
limpia, de manantial.

Agua que venga de adentro,
de la profundidad mineral.

Agua con ansias de espacio
y deseos de cantar.

Agua que corra regando
y le ponga flores a la soledad.

Tráeme un poco de agua
con frescura matinal.

Agua que al llegar la noche
arrulle con murmullos de mar.

4 comentarios:

ALEJANDRO MUÑOZ ESCUDERO dijo...

Estimada Cristina, mi comentairo es simplemente para agradecer tus palabras en mi blog ... y sí, gracias a Dios bendito por los dones y talentos que nos ha regalado.

Un abrazo fraterno y que Dios te colme de bendiciones.

Un nuevo amigo,

Alejandro

Lycette Scott dijo...

El agua todo lo puede, todo lo sana y otdo lo renueva.
Besos

Blas Torillo Photography dijo...

Hola Cristi.

Esta agua de la que hablas es como el amor que sale de las entrañas y que si no llega al mar "del otro", no serviría ni para limpiar las propias penas.

Así, el agua-amor que sale desde dentro de nosotros, desde dentro de cada uno, debe acercarse cada día más a las riberas del amor del otro, para realizarse y dar sus beneficios y que no se quede estancada nomás para refrescar nuestro egoísmo.

Besos. Salu2 a Memo.

Esther dijo...

Yo también me uno a este reclamo, también me encantaría tener de esa agua ¡precioso! :)

Más saluditos.