GUILLERMO ENRIQUE...
...no me esperes ni preguntes.
No sospeches. No supliques.
No me sigas. No reproches.
No disculpes.
No te hastíes.
No me dejes.
No me juzgues... ni me sueñes.
Ni admirado me alabes,
ni enojado me abandones.
Ámame,
tú que puedes, ¡ámame!
...no me esperes ni preguntes.
No sospeches. No supliques.
No me sigas. No reproches.
No disculpes.
No te hastíes.
No me dejes.
No me juzgues... ni me sueñes.
Ni admirado me alabes,
ni enojado me abandones.
Ámame,
tú que puedes, ¡ámame!
7 comentarios:
Hola amiga...
Supongo que aquél entenderá... ¿Cierto?
Je...
Besos
¡Si, Blas!... Gracias a Dios hace 24 años que lo viene entendiendo. Gracias por tu visita y participación. Un beso.
Hola Cristina:
vine a visitarte en agradecimiento a tu linda visita.
Entré a tu blog y me encantó este poema que, por lo que le respondes a Blas, te hace caso hace tiempo.
Conmovedor.
Vuelvo a visitarte pronto
Que bonito Cris!!
Y eso es porque tu también le sigues amando.
Besos preciosa!
que se ama cuando se ama? Abrazos desde el Sur
Que lindo poema Cristina! Muchos saludos.
que bello poema amiga
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